¿Cuántos eran? ¿500, 1000...? Eran muchos, muchísimos argentinos los que esta tarde volvieron a copar Copacabana para un banderazo en apoyo a la selección que mañana, domingo, enfrentará en Río de Janeiro a Bosnia por la primera fecha de su grupo, en el Mundial.
La cita fue anónima. Nadie sabe quién lanzó la iniciativa pero desde hace varios días se sabía que hoy, a las 16, se iban a reunir los argentinos en el puesto 4 de Copacabana. El centro de Río.
Pero desde las 15, cientos de celestes y blancos empezaron a juntarse y ya no pararon de cantar y cantar. Y a medida que pasaban los minutos llegaban más: en camionetas, en autos, en motorhome... Mientras, la policía militar custodiaba celosamente todo el lugar.
Cuando ya fueron miles y las canciones (contra Brasil, en apoyo a la selección, y por supuesto contra Inglaterra) fueron tomando color y calor, algunos quisieron pasar a mayores y se metieron en la avenida Atlántica para tratar de cortar el tránsito.
Fue cuando la policía utilizó gas pimienta para alertar a los argentinos que no permitiría que eso pasara.
Fue un hecho que no pasó a mayores y que tampoco cortó el aliento del banderazo que, a esta altura, marcó historia en el Mundial.